Yukai Fest 13/04/2025
¡PRIMER EVENTO DE ANIMÉ COMO ILUSTRADORA! Un evento canónico para mí como ilustradora amateur en su camino por ser profesional.
Después de las tres (sí, tres) suspensiones de la Kuri por cuestiones climáticas, tuve la posibilidad de pagar un stand para mí sola en este evento acá en capital. A pesar de que la mayoría de mi arte era de temática de San Valentín (ya que la Kuri se suponía que sería para el Día de los Enamorados), decidí ir con todo y más para este día. A mi arsenal añadí muchos aritos de porcelana fría que había hecho hacía un par de años cuando me las di de artesana. Era la posibilidad de poder hacer algo con ellos jaja. También aproveché e imprimí copias de muchas ilustraciones a mano que había hecho ya que me parecía que mi stock era pequeño…
Como últimos agregados, algunos Funkos que mi novio me dio en concesión y un par de ejemplares de mi libro, MINAMI, para hacerme algo de propaganda.
Iba cargadísima con mi valija y un soporte de melamina que usaba para grabarme dibujando, ideal para desplegar toda mi merch. Llegué a mi stand, una simple mesa de madera que pude convertir en un lugar bonito y colorido. Hasta eché algo de perfume a la sábana que llevé a modo de mantel para hacer de la visita a mi stand, una experiencia agradable y placentera. Estaba lista con mi posnet, Kirby, para recibir a mis clientes.
La jornada fue larga y todavía no había mucha concurrencia así que aproveché a ayudar a las chicas del stand de al lado a cortar stickers.
Sin embargo, a medida que pasaba las horas, también lo hacía la gente que pasaba por mi mesa. Muchos se quedaban mirando, muchos preguntaban, chusmeaban y alababan mis dibujos… pero ninguno se prestó a comprar. La sensación de desaliento y vergüenza (porque sí, las cosas como son), se volvieron cada vez más grandes, más reales. Para peor, los stands a mis laterales recibían varios clientes ya que vendían agendas y cuadernos (muy lindos) y figuras de porcelana fría, también muy bonitas.
Cuando quise darme cuenta, era de noche, era momento de ir desmontando… y no había vendido nada. Absolutamente nada. Ni un sticker.
Fue una experiencia amarga, lo reconozco. Me sentí angustiada, lloré, me sentí frustrada y humillada. Quise hacerme a la idea de que capaz vendería poco, y vislumbré la posibilidad de que capaz no vendiese nada pero es muy distinto cuando realmente te pasa. Es una situación fea que no le deseo a nadie, sobre todo si está comenzando.
Pero en fin, me di a la tarea de tomar decisiones concretas, de buscar soluciones. Decidí rebajar mis precios lo más posible como para no regalar mi trabajo y, aunque fuera, recuperar algo de lo que invertí. Esperemos que funcione.
No creo recuperar todo en un solo evento. Fui capaz demasiado optimista al pensar que vendería mucho, creo que cualquier ilustrador sueña con tener una fila de gente pujando por sus productos y con colocar el cartel de “AGOTADO”. Es un bálsamo para el ego, necesario a veces. Pero también es sensato prepararse para el peor escenario posible. Por más que duela, no quiero rendirme. Estoy dispuesta a seguir luchando por difundir mi arte y volverlo redituable. Habrá más eventos y uno solo no me va a desanimar. Y pienso leer esto cada vez que la frustración me vuelva a tirar abajo.
Acá les dejo foto de aquel día y link a mi video de Youtube en donde les cuento esta experiencia ♥ ¿Me ayudas con una likeada y una suscripción? ¡Gracias!
